El Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales de la UNRC propone crear la Diplomatura Superior de Bioinsumos de Uso Agrícola. La propuesta fue elevada al Consejo Superior de la UNRC para su tratamiento.
Este proyecto, que ha sido resultado del trabajo conjunto de docentes-investigadores y, tiene como objetivo proporcionar una formación académico-profesional en el campo de los bioinsumos, como así también en la innovación biotecnológica en el contexto de una agricultura sustentable, con un enfoque orientado tanto al ámbito académico como al sector productivo.
La propuesta, que ahora será tratada por el Consejo Superior de la UNRC, surge en un contexto donde la agricultura, pilar de la economía argentina, enfrenta la necesidad de evolucionar hacia prácticas más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. La agricultura sustentable no solo busca mantener la productividad a largo plazo, sino también minimizar el impacto negativo en los recursos naturales. En este sentido, los bioinsumos juegan un rol fundamental al ofrecer alternativas biológicas para la protección y nutrición de los cultivos, reduciendo la dependencia de productos químicos sintéticos.
El término bioinsumo hace referencia a todo producto que consista o haya sido producido por microorganismos o macroorganismos de origen animal o vegetal, extractos o compuestos bioactivos obtenidos a partir de ellos (sin que involucre reacción química alguna), y estén destinados a ser aplicados como insumos en la producción agrícola con fines nutricionales, estimulación vegetal, enmiendas, sustratos, protectores biológico o para la protección del cultivo. El concepto es amplio y abarca una gama de productos tales como aquellos destinados a la protección, nutrición y estimulación vegetal, como inoculantes, estimulantes, enmiendas, sustratos, protectores, acondicionadores y agentes de control microbiano de origen biológico.
La aplicación de bioinsumos en la agricultura representa una práctica consolidada en la región, que trae aparejados una serie de beneficios económicos (por ejemplo incrementar los rendimientos de los cultivos, cubriendo en mayor nivel las necesidades alimentarias de la población y permitiendo a los productores obtener mayores ganancias) y medioambientales (aumentando los niveles de sustentabilidad e inocuidad en la producción agroalimentaria y agroindustrial, fomentando así la industrialización de la ruralidad y el agregado de valor en origen).
“La diplomatura está diseñada para formar profesionales con una sólida base en la prospección, diseño, producción y evaluación de bioinsumos, con un enfoque especial en aquellos de origen microbiano. Además, se abordará la legislación vigente tanto a nivel nacional como internacional, permitiendo a los egresados comprender y aplicar las normativas en el registro y uso de estos productos”, detallaron los docentes investigadores y principales responsables del armado de esta propuesta: Fabricio Cassán (Director de la Diplomatura), Fernando Ibañez (Coordinador Adjunto) y Juan Palazzini (integrante del Comité Académico).
La relevancia de esta iniciativa no solo reside en su aporte a la formación de profesionales capacitados para enfrentar los desafíos de una agricultura en constante transformación, sino también en su potencial para contribuir al desarrollo de tecnologías innovadoras que promuevan un equilibrio entre la productividad agrícola y la preservación del medio ambiente.